SANTIAGO – El talento sin probidad es un azote» sentenciaba el célebre escritor colombiano José María Vargas Vila. Sin lugar a dudas el ingenio creativo de este rebelde de las letras latinoamericana quiso dejar esclarecido que la capacidad y la preparación intelectual es de emular cuando los conocimientos son puestos al servicio de causas nobles.

La historia reciente de nuestro país registra episodios que han fortalecido el sistema de partidos, así como la democracia que tiene en un lugar visible y reservado la estampa con las siglas del Partido Revolucionario Dominicano.

El PRD, desde su fundación en la Habana , Cuba en el año 1939, ha sido una escuela democrática que ha jugado roles fundamentales en las luchas por la libertad e identidad de nación.

Concluido el proceso electoral del año 2004, y consigo el desplazamiento del poder político del PRD, por parte del hoy gobernante Partido de la Liberación dominicana PLD, se produjeron sucesos que de forma significativa marcaron el destino del partido blanco.

Se registra un protagonista que tuvo un papel de primer orden en la modificación constitucional que permitió  el intento reeleccionista del entonces presidente Hipólito Mejía, acción esta que se llevo en las patas de los caballos la suerte electoral del PRD.

Ese mismo protagonista fue el artífice de la expulsión del partido inolvidable compañero Hatuey Decamps, porque este último se opuso a la aventura reeleccionista de Hipólito Mejía que trajo consigo la derrota del PRD.

Ese mismo protagonista que exhibe un marcado narcisismo y goza con escucharse asimismo, con la cara muy dura hizo guardia de honor al cadáver del Dr. Joaquín Balaguer ,olvidando que este fue uno de los verdugos principales de sus extinto padre y gloria nacional Maximiliano Gomes ( El Moreno) y cuando el periodista Marino Zapete le señalo el desatino ,fue donde este laboraba y le golpeo de forma inmisericorde..

El  «Gran» protagonista de todas estas iniquidades y andanzas pandillistas es Guido Gómez Mazara, que hoy enfila sus cañones hacia el líder y presidente del PRD, Ing. Miguel Vargas Maldonado, inventando todo tipo de mentiras y articulando una campaña mediática diabólica con fines de destruirle y afectar la propia identidad partidaria.

Pero afortunadamente como no hay deuda que no se pague y plazo que no se cumpla, llego el momento que las bases históricas y los nuevos valores que conforman hoy el PRD, tengan esas facturas nuevas y viejas en las manos y cuando asome Guido le digan esto nos debe y llego la hora de pagar.

POR: La Redacción