Los semáforos son considerados como una de las señales de control del tránsito más importante. No hacer caso a sus cambios de luces (verde, amarillo y rojo) podría causar accidentes aparatosos, incluso la muerte.

De acuerdo con la ley 63-17 sobre Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial de la República Dominicana, la violación a esta señal conlleva una multa de uno a cinco salarios mínimos del sector público centralizado y la reducción de los puntos en la licencia de conducir que determine el reglamento.

Sin embargo, la violación a la luz roja en el año 2016 constituyó la segunda causa de infracciones, luego de las impuestas por conducir sin casco protector, según reporte de la Dirección de Seguridad del Tránsito y Transporte Terrestre. (Digesett)

Probablemente no sepas que cuando te detienes o cruzas una intersección en la ciudad un grupo de técnicos supervisa cada movimiento que realizas desde el Centro de Control de Tránsito, ubicado en la avenida 27 de Febrero de esta capital, gracias a las cámaras de vigilancia, conectadas a los semáforos.

Solo en el Gran Santo Domingo funcionan aproximadamente 300 semáforos, de los cuales 259 unidades son responsabilidad del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), los demás están a cargo de los ayuntamientos, informó la directora de la entidad, Claudia Franchesca de los Santos.

Según indicó, solo cerca de 15 intersecciones tienen cámaras enlazadas con el Centro de Control. Actualmente, el Intrant busca poder tener acceso a las cámaras del sistema de seguridad 911.

El organismo rector de tránsito y transporte en el país colabora con el mantenimiento de los dispositivos de control de tráfico en manos de los cabildos. “Lo que se plantea con el nuevo sistema es que todas las intersecciones del Gran Santo Domingo estén monitoreadas desde el centro en coordinación con las alcaldías”, sostuvo. Próximamente, el Intrant llamará a licitación para la adquisición de un sistema de semaforización para el Gran Santo Domingo programados para priorizar el paso de los nuevos autobuses que formarán parte del sistema de transporte de pasajeros. “Los autobuses necesitan una velocidad más ágil en los corredores para poder cumplir con los tiempos y frecuencia que se le establezcan. Hay una especie de semaforización que se llama prioridad bus, que cuando el autobús se acerca cambia la programación de semáforo para que el bus pueda pasar sin ningún problema”, explica la funcionaria.

El tiempo promedio que tarda un semáforo en cambiar de verde a rojo es de un minuto 20 segundos. El máximo es de un minuto 60 segundos a un mínimo de 80 segundos. No obstante, muchos conductores se quejan de que algunos semáforos no están perfectamente coordinados, empeorando el congestionamiento vehicular.

Algunos, como el secretario de transporte del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Mario Díaz, ha advertido de un posible colapso del sistema de semáforos en el Gran Santo Domingo y el Distrito Nacional debido a que los semáforos para regular el tránsito electrónicamente en estas demarcaciones se encuentran “seriamente dañados y obsoletos en su mayoría”.

En el monitoreo para coordinar la agilización del tránsito intervienen agentes de la Digesett, que a través de la radio comunican al personal del Centro de Control las incidencias ocurridas en las intersecciones. Una vez notificada la situación, un equipo especializado mediante una computadora acciona el color dependiendo la solicitud. En algunos casos se procede de manera manual, porque no todas las intersecciones están enlazadas al sistema. “El objetivo es eficientizar y modernizar el Centro de Control”, destaca la directora del Intrant tras asegurar que la entidad trabajará de la mano con la tecnología. El Centro de Control se creó originalmente para monitorear la seguridad de los túneles, elevados y los semáforos de la avenida 27 de Febrero. Hoy, tiene bajo su mando el funcionamiento de más de 200 semáforos.

Directora del Intrant, Claudia Franchesca de los Santos, dice se busca implementar mayor tecnología al sistema de semaforización.

Un sistema altamente costoso de mantener

El sistema de semaforización no solo está diseñado para los vehículos, los hay programados para el peatón. La directora del Intrant reconoce que no todas las intersecciones disponen de estos dispositivos electrónicos para el caminante, pero dijo que a través del proyecto Plan Peatón Seguro se están dotando de estos aparatos a aquellos lugares donde más se necesiten.

De los Santos precisa que todo el sistema (vehículo-peatón) es muy costoso tanto en su mantenimiento como sustitución, de ahí la importancia de la supervisión a través de las cámaras y la fiscalización. “En la Abraham Lincoln con Charles Summer hace un tiempo un vehículo chocó un controlador de semáforos, y cuando cotizamos esto para repararlo nos lo cotizaron en 12 mil dólares”, sostuvo.